13 de enero de 2013, es impactante como pasa el tiempo, como se calman las aguas tras el temporal, como brilla el sol después de la lluvia, así mismo esta mi vida, en paz tras la tormenta. El vertiginoso cambio de carrera y de universidad ha quedado atrás, el estrés de los exámenes se perdió en algún lugar bajo el sol del verano y parte de mi obsesión con Ana ha mermado tras la fuerza del auto convencimiento, pero siento que sigo al borde; al borde de la obsesión, al borde de la locura, al borde de la tristeza, al borde de la gordura. Mi cordura es hoy un fino manto que cubre mis miedos y que puede rasgarse con un simple roce. Aun así siento que estoy de cierto modo bien, bien dentro de lo bien que puedo encontrarme yo, al menos no  he llorado de ira mal contenida, ni de desesperación y al callar puedo ver pensamientos agradables venir a mi mente; no duran mucho ahí, pero al menos existen, puedo disfrutarlos unos instantes antes de que el pesimismo y el miedo los devoren. Tengo que admitir que si bien me he sentido estable aun hay cosas que me desequilibran y que a fuerza de voluntad mantengo a raya, entre ellas el pesarme cada vez que veo una bascula o contar mentalmente las calorías que ingiero, mentir a la hora de almorzar y fingir que tengo muchísima hambre a lo largo del día, nacen de mi inconsciente, no las controlo, son impulsos arraigados en mi que torturan mi mente a diario.

Hoy papá hizo un montón de papas fritas, eran muchísimas y con un adorable aroma a comida grasosa y deliciosa y fue literalmente como si mi mente se fuese a blanco y cuando recuperé el control ya había devorado 3 platos, aun ahora a las 1:40 am me siento mal por aquello y si bien no quiero llorar deseo visceralmente castigarme de algún modo traumatizante o ver algunas imágenes thinspo para recriminarme mentalmente con mas fervor y así no volver a cometer este error tan grave para poder sentir aquel frio constante e interminable en el estomago, aquel sonido de suave gruñir que produce el hambre y que al cerrar mis ojos pueda sentirme conforme conmigo misma.